¿Estamos lavando nuestra ropa de una manera sustentable y ecológica?

¿Estamos lavando nuestra ropa de una manera sustentable y ecológica?

La lavadora es una herramienta indispensable en nuestras casas. La tecnología y los avances nos han permitido lavar la ropa oprimiendo un simple botón. Sin embargo, ¿lo estamos haciendo bien? ¿Estamos lavando de una manera correcta y amigable con el medio ambiente?

¿Sabías que las lavadoras existen desde el siglo XIX? A pesar de que pueda sonar una locura, es cierto. El año 1851, en Estados Unidos, se creó la primera lavadora que funcionaba manualmente. Estaba compuesta por un tambor, en donde uno introducía la ropa, el agua y el jabón, y por medio de una palanca y un sistema prolijamente elaborado, permitía que la ropa se lavara. Posteriormente, en el 1908, se creó la lavadora eléctrica, la cual hasta el día de hoy está presente en nuestras casas, solucionándonos un detalle importantísimo: la limpieza de nuestra ropa.

Al ir pasando el tiempo, los diferentes modelos de lavadoras fueron evolucionando. Diferentes características fueron apareciendo en estas máquinas inteligentes, como por ejemplo su tecnología de lavado, la velocidad, su capacidad, algunas dos en uno (lavadora y secadora), etc. Sin embargo, solo algunas han considerado un detalle muy importante al momento de pensar en el mundo y en el agua: la sustentabilidad, la ecología y el medio ambiente.

A pesar de que sí existen avances en cuanto al ahorro hídrico y a la reutilización de agua, las máquinas siempre serán máquinas, por lo que el trabajo más importante en el momento de tomar decisiones que aporten al medio ambiente está en nosotros; está en nuestras manos tomar en cuenta aquellas recomendaciones que nos permitan ahorrar agua y no gastar energía de más. Es por esto que VDS les trae diversos tips para que la cuenta de la luz y del agua salgan más baratas, y al mismo tiempo, para que aportemos, aunque sea un granito de arena, a que nuestro planeta pueda vivir y respirar de la mejor manera posible.

1. Lava cuando realmente sea necesario

Algunas veces usamos una polera, camisa o pantalón un par de horas, y por costumbre, lo primero que hacemos es arrojarla a la ropa sucia. Es aquí en donde debemos ser precavidos y capaces de realizar un correcto juicio: ¿realmente está sucio? Recordemos que utilizar una prenda dos días seguidos no cambiará nada en tu vida, pero sí en la del planeta.

2. Llena tu lavadora

Cuando echemos la ropa a lavar, preocupémonos de que la carga de la lavadora esté completamente llena. Lavar en cantidades pequeña significa un gasto de luz y de agua innecesario.

3. Programa la lavadora

Utiliza un programa ecológico. Casi todos los últimos modelos de lavadoras tienen la tecnología de pesar la ropa y programar una cantidad de agua exacta para ese peso, sin embargo, en algunas puedes seleccionar diferentes opciones que aumentarán tu ahorro. Por ejemplo, elige lavar con agua fría.

4. Detergente ecológico

Los productos que utilizamos al momento de lavar también tienen implicancia en nuestra intención de no contaminar el medio ambiente. Existen un sinfín de alternativas de productos naturales que, al igual que los tradicionales, dejarán tu ropa como nueva. Al mismo tiempo, estos productos naturales se conservan más tiempo y colaboran en minimizar nuestra huella ambiental.

5. Secadora

Al igual que las lavadoras, las secadoras pasaron a ser nuestras fieles amigas. A pesar de que algunas personas solo las utilizan en invierno, existen otras que lo hacen durante todo el año. ¡Aprovechemos el sol y el calor natural! Si podemos evitar utilizar la secadora, ¡hagámoslo! Colguemos nuestra ropa en el patio o terraza, y en unas horas estará seca y lista para guardar.

6. Planchar lo justo y necesario

La plancha es otra herramienta que consume muchísima electricidad, además de que, a la larga, deteriora las telas de nuestras prendas. Es por esto que les recomendamos que, en el caso de la ropa secada en máquina, la saquen inmediatamente y la doblen o cuelguen, ya que al estar caliente pueden evitar arrugas. En el caso de la ropa colgada en el tendedero, es necesario hacerlo de la mejor manera posible, es decir colgar cada prenda de una manera ordenada, utilizando nuestras manos para estirar cada una de ellas. Así, cuando se seque, no será necesario su planchado.

VDS se pone la camiseta por el planeta, ¿y tú?